Bizcocho básico.
Este es un bizcocho todo terreno, que queda consistente, pero suave y jugoso, apto para rellenar y cubrir de fondant o para lo que queramos...
Es rápido de preparar y no tiene secretos, ni tips, ni nada, siempre sale bien (bueno, en condiciones normales, sin milagros... siguiendo estos sencillos pasos)
Ingredientes
- 3 huevos tipo "L" o 4 "M"
- 420 gr de azúcar
- 200 ml de aceite de girasol (1 taza aprox)
- 240 ml de leche entera o buttermilk o 2 yogures griegos
- 1 sobre de levadura Lidl
- 420 gr de harina
- Ralladura de 1 limón
- 1 cucharadita de esencia de vainilla (5ml)
Preparación:
Estos ingredientes son para un molde de 22cm, llenar ¾ del molde.
Pre-calentar el horno a 180º, yo lo pongo en la rejilla del medio y con calor arriba y abajo y sin turbo y no abro el horno hasta pasados 40 minutos, si al pincharlo esta un poco crudo, pero dorado por fuera, lo tapo con papel de aluminio y bajo un poco la temperatura del horno.
Tanto los huevos, como la leche deben estar a temperatura ambiente, no fríos de nevera.
En un bol ponemos los huevos lo batimos junto al azúcar hasta que tengamos una mezcla cremosa y blanquecina, a velocidad media- baja y con las barillas. Añadimos el aceite y batimos un poco mas, agregamos la ralladura y la esencia.
Tamizamos la harina con la levadura (si queremos bizcocho de chocolate, tamizamos también el cacao en polvo (tipo Valor), le ponemos 70 gr de cacao y restamos lo mismo de la harina (350 gr de harina y 70 gr del cacao), cambiamos las barillas por las palas o amasadoras y la agregamos a la mezcla, alternándola con la leche o yogures, sin batir mucho, empezamos y terminamos con la harina o añadimos la harina en tres veces y la leche en dos.
Rociamos el molde con spray desmoldante y vertemos la mezcla.
Introducimos el molde en el horno y no abrimos la puerta hasta pasados 40 o 45 minutos y vamos probando si esta cocida, metiendo una brocheta fina en el medio del bizcocho hasta que nos salga limpio.
Dejamos unos minutos en el molde y lo desmoldamos sobre una rejilla alta, para que circule el aire por debajo y no se humedezca el bizcocho, cuando ya esté casi frio lo envolvemos en papel film y al estar bien frio se mete en la nevera hasta el otro día, sacándolo para rellenarlo y volver a ponerlo en la nevera, hasta el día siguiente en que lo cubriremos con el fondant.
Se puede congelar, pero sin rellenar, ni cubrir de crema o fondant, descongelar en la nevera de un día para otro antes de su uso
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